Los populares Arlequines son pequeños cipríndos vistosamente coloreados, de apariencia graciosa y que adornan muy bien cualquier acuario de agua dulce además de ser muy resistentes a las enfermedades parasitarias y a los errores comunes de cuidado. Viven en grandes bancos en arroyos y lagos del sureste Asitático al abrigo de plantas acuáticas, troncos y piedras, en zonas sombrías para ocultarse de sus depredadores.
Se trata de cirpínidos típicos con el cuerpo muy comprimido lateralmente, aletas cortas y rígidas, boca grande súpera y ojos de gran tamaño. Su desarrollada musculatura les permite efectuar rapidísimos deslizamientos para atrapar a sus presas o huir de cualquier peligro. Vistos lateralmente tienen forma ligeramente romboide, con la zona dorsal gibosa y el vietntre pronunciado. Su coloración, muy llamativa, consiste en un fondo de color marrón anaranjado y un vientre blanco, con una mancha triangular negra que se extiende desde la mitad del cuerpo hasta el pedúnculo caudal. Los lóbulos de la aleta caudal tienen los bordes superiores rojos, y la dorsal es rojiza. El resto de aletas son incoloras. Durante la freza el color marronoso del cuerpo se convierte en rojo granatoso muy brillante. El dimorfismo sexual, como otros ciprínidos, se distingue en que los machos son más esbeltos que las hembras, teniendo estas, además, el vientre abultado y las aletas más pequeñas. Pueden medir 6 cm de largo y vivir hasta 10 años.
A pesar de su popularidad no son muy adecuados para los más novatos ya que se resienten con más facilidad que otros miembros de la familia (como los Barbos) a las malas condiciones de mantenimiento y a las variaciones bruscas de las condiciones acuáticas, aunque pueden tolerarlas perfectamente hasta cierto punto. Un acuario de 60 litros como mínimo puede albergar a unos 10 ejemplares, y debe estar abundantemente decorado con plantas, troncos y piedras que les ofrezcan escondites. Para que estén tranquilos y muestres su mejor colorido es necesario que el sustrato tenga un color oscuro y la iluminación sea débil, condiciones sin las cuales se estresan y no muestran su comportamiento natural. No aprecian corrientes demasiado fuertes pero necesitan mucho oxígeno en el agua. La temperatura puede estar entre 24 y 35 ºC, el pH entre 5 y 7 y la dureza debe ser menor que 10 ºdGH, soportando bien aguas más alcalinas (pH de hasta 7,5) y duras (dureza de hasta 15 ºdGH), siendo fácilmente atacados por enfermedades en valores de pH y dureza más altos. No toleran concentraciones de nitrato superiores a 50 ppm ni la menor presencia de nitrito y amoniaco, aumentando la probabilidad de enfermar si estos valores son demasiado altos. Es muy aconsejable filrar mediante turba para mantenerlos lo más sanos posible.
No tienen ningun reparo en comerse cualquier cosa que caiga sobre la superficie del agua, aceptando escamas, gránulos, vivos, cogelados y liofilizados. Al igual que los demás Ciprínidos necesitan un cierto aporte vegetal en su dieta, por lo que algunos aportes semanales de copos de Spirulina les son bastante beneficiosos. Si no se mantienen en grupos lo bastante grandes, son constantemente molestados por sus compañeros o el agua no está en buenas condiciones es muy posible que no se alimenten, muriendo irremediablemente si no se corrige rápidamente la situación.
Son peces muy pacíficos que no muestran actitudes agresivas hacia ningun pez que conviva con ellos. No es conveniente mezclarlos con peces demasiado nerviosos o temperamentales de su tamaño (como los Tetras llamados "palos de golf", Barbos y similares) que los atacan frecuentemente, estresándolos y haciendo que se arrinconen y no se alimenten. Tampoco conviene mezclarlos con peces demasiado grandes que puedan devorarlos (Óscar, Terror verde, ...) o demasiado agresivos que tengan su tamaño (Boca de fuego, MBunas, ...) que los atacan constantemente hasta matarlos de estrés. Si no se mantienen en grupos lo bastante grandes pueden agruparse con otros peces de su tamaño o morir al no alimentarse. Pueden ser asociados con otros peces pacíficos de su tamaño (Tetras como los Neones y los Fantasmas rojos, otros Ciprínidos como los Neones Chinos, Poecílidos como los Guppies), peces de fondo (Corydoras, Ancistrus, Plecostomus, Otocinclus) y cíclidos pacíficos (Discos, Cíclido Cerradura, Ramirezi, Apistogramma, ...).
Son de los Ciprínidos más difíciles de reproducir en cautividad dadas las condiciones que exigen para frezar, a la fotosensibilidad de los huevos y al complicado cuidado de los alevines. Necesitan aguas muy ácidas (pH inferior a 6) y extremadamente blandas (menos de 2 ºdGH de dureza), filtradas con turba y levemente iluminadas. La decoración debe formarse por plantas de hojas grandes (pueden ser de plástico). Se debe escoger a la pareja adecuada (deben ser una hembra joven y un macho adulto, de unos dos años) y mantenerla en este acuario de cría durante algunas semanas alimentándose sólo con presas vivas. El desove empieza al atardecer. Tras un elaborado cortejo el macho limpia el anverso de una hoja y atrae a la hembra hasta ella. Esta deposita sus huevos en la hoja escogida por el macho y éste los fecunda después, para la cual cosa nadan de espaldas. Una vez terminado el desove se debe sacar a los adultos para evitar que devoren los huevos. Seguidamente debe oscurecerse el acuario completamente con cartulinas negras opacas durante los dos días que dura la incubación. Con una linterna muy débil se debe comprobar si han nacido los alevines, momento a partir del cual se deben aditar infusorios para que puedan alimentarse. Al cabo de una semana desde su nacimiento se quita una cartulina, quitando una cada semana durante las semanas siguientes. Al mes de vida pueden ser instalados en un acuario normal para que se desarrollen por completo. Los alevines son extremadamente sensibles a la contaminación del agua y las variaciones bruscas de los parámetros acuáticos. La más mínima luz incidente sobre los huevos durante la incubación facilita el desarrollo de hongos, que acaban con los huevos.
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