Fuente: commons.wikimedia.org
Fuente: www.desarrollosostenible.es
Debido a su origen tropical de selva lluviosa y umbría, su cultivo resulta complicado no siendo recomendable a principiantes empezar con esta especie, pues se resiente bastante rápido de las condiciones inadecuadas de mantenimiento así como de los errores de cultivo que corrientemente se suelen cometer. Sus grandes y tiernas hojas de color verde intermedio demuestran que no es necesario que reciba sol directo; De hecho, ni si quiera es aconsejable, pues las hojas y todas las partes de las flores se queman fácilmente con el sol, por lo que se debe mantener la planta alejada del mismo a menos que esté muy desarrollada y aclimatada, en cuyo caso puede soportar una ligera exposición solar durante una o dos horas diarias siempre que la temperatura no exceda los 25 ºC. En climas propicios se puede mantener en el exterior bajo tupidos árboles que le dan una apreciada sombra y protección del sol. Si la planta no recibe suficiente luz sus hojas se desarrollan espectacularmente pero no florece. Como planta tropical que es, no tolera ni el frío ni las heladas. Temperaturas inferiores a 10 ºC acaban con ella mientras que la parte aérea se pierde por debajo de los 13, pudiendo rebrotar de nuevo ante una subida de la temperatura pero siempre que estas temperaturas duren poco tiempo (no más de cinco o seis días). Lo ideal es mantenerla constantemente entre 24 y 28 ºC y sin cambios bruscos. La humedad ambiental es sin duda el punto más delicado en el cultivo de esta planta, pues debido a su gran superficie foliar transpira en exceso y pierde mucho agua, algo que si ocurre en ambientes demasiado secos (como los que se dan en habitaciones con calefacción o aire acondicionado) provoca el secado rápido de todas las hojas y la muerte de la planta si no se corrige rápidamente la situación. Es imprescindible el vaporizado diario con agua descalcificada y la colocación, cerca de la planta, de un recipiente con agua o un humidificador. En lo referente al riego, esta planta es menos exigente que en humedad ambiental, si bien tiene un elevado requerimiento hídrico por el exceso de transpiración que sufre. Hay que regar el sustrato de forma que se mantenga siempre húmedo pero no encharcado, pues el rizoma se pudre fácilmente. Esta planta no tolera la sequía, y de faltarle el agua, sus hojas se acaban secando y cayendo, por lo que no hay que dejar que el suelo se seque jamás. Esta planta no presenta periodo de reposo invernal, por lo que el abonado debe realizarse durante todo el año con un producto para plantas de flor. Es importante que el sustrato en el que esté plantada sea suelto, drenado y muy bien aireado para evitar pudriciones por encharcamiento y asfixia radicular. El pH del mismo debe ser ligeramente ácido (entre 5,5 y 6,5) y totalmente libre de sales. Bajo condiciones de excesiva alcalinidad y calcificación edáfica puede sufrir distintas formas de clorosis foliar que, dado el caso, pueden causarle la muerte, por lo que se deben aplicar quelatos de hierro o, mejor aún, no regar con agua calcárea o alcalina.
Fuente: www.ogrodkroton.tl
Se sentirá como en casa si se planta cerca de un estanque de agua dulce ya que estará abastecida de humedad y agua suficiente en el suelo, estando aún más cómoda si se planta bajo un tupido árbol que le tape el exceso de sol. No conviene plantarla en estanques de agua alcalina ni en zonas donde el suelo esté saturado de agua ya que moriría irremediablemente. Poniéndola en una maceta lo bastante alta y con tierra adecuada se soluciona este problema. Combinada con otras hierbas de gran tamaño e incluso con arbustillos, ofrece una bellísima opción decorativa para cualquier estanque exterior e interior.
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Esta planta se multiplica corrientemete por fragmentación del rizoma subterráneo, pues es una técnica sencilla que permite obtener un buen número de descendientes. El momento más adecuado para hacerlo se da cuando termina la floración; Se corta un pedazo del rizoma subterráneo que contenga una o varias yemas y se planta, en posición horizontal, en otro lugar. En poco tiempo hechará raíces y tendremos una nueva planta. Tambien es posible la propagación mediante semillas, que se siembran immediatamente después de ser extraídas del fruto en un sustrato suelto, ácido, que se mantenga siempre húmedo y a unos 28 ºC de temperatura. La germinación es bastante tardía.
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