Chaetodon guttatissimus - Pez mariposa salpicado

El conocido como pez mariposa salpicado es un pez marino de la familia de los Quetodóntidos, familia de peces estrictamente tropical que se halla extendida por todos los mares y océanos cálidos de la tierra asociada siempre a construcciones coralinas de grandes dimensiones. Es de los más pequeños de esta familia y tambien uno de los más delicados dada la gran especialización de su dieta. Se puede encontrar en todo el océano Índico viviendo en parejas, trios o pequeños grupos que pastan constantemente sobre las construcciones de roca y coral para encontrar sus alimentos predilectos.

Presenta una fuerte compresión lateral en el cuerpo y una musculatura muy desarrollada que le permite moverse sin problema alguno en las aguas movidas y turbias en las que vive. Sus escamas son de tamaño pequeño y poco visibles. Las aletas son más bien pequeñas pero móviles (especialmente las pectorales) y posee ojos de tamaño relativamente grande. Al igual que el resto de peces mariposa, la boca de éste es larga, pequeña y terminada en punta lo que le permite buscar su alimento en pequeñas ranuras inaccesibles para otras criaturas. Su líbrea consiste en una base de color blanco ligermanete grisáceo que se oscurece en las zonas dorsal y anal. Todo el cuerpo está cubierto de pequeños puntos negros de reducidas dimensiones. En el pedúnculo caudal presenta una franja de color amarillo unida a otra más delgada de color negro. tambien posee una franja vertical negra que atraviesa cada ojo y un vistoso ribete amarillento en la aleta dorsal y otro en la anal. Las aletas ventrales son blancas y la caudal y las pectorales, incoloras. No presentan dimorfismo sexual, llegan a medir 12 centímetros de largo y, si se mantiene en condiciones adecuadas, supera los 10 años de vida en cautividad.

Este pez reclama un acuario de gran tamaño, con multitud de grietas y agujeros donde esconderse y mucho espacio para nadar. Lo ideal es un acuario superior a 500 litros para un solo individuo y de más de 700 si se quiere acompañar de otras especies. Una extensa construcción de roca viva que cubra la pared posterior del tanque es necesaria para ofrecerle superficies en las que pueda pastar y esconderse cuando lo desee. La iluminación debe ser muy intensa para, por un lado, permitir el crecimiento de las algas que forman parte básica de su alimentación y, por otro lado, para resaltar su líbrea. Un fondo de color claro resalta este hecho. Asimismo es recomendable el uso de sustratos de grano fino para permitir el establecimiento de microfauna que sirve de alimento para este pez. Es necesario un movimiento intenso en el agua así como una excelente aireación. Los cambios semanales de la misma (de al menos un 20 - 30%) mantienen los compuestos nitrogenados a raya mientras que un espumador de proteínas elimina la urea a la que este pez es muy sensible. Las condiciones del agua, siempre estables, comprenden una temperatura entre 23 y 28 ºC, un pH entre 8 y 8,5 y tasas de nitrato nunca superiores a 20 ppm. Es indispensable mantener a 0 los nitritos y el amoniaco. Se trata de un pez que, si consigue superar la delicada fase de aclimatación y recibe la alimentación adecuada, resiste condiciones algo alejadas de las mencionadas durante bastante tiempo siempre que no se den cambios bruscos. Bajo condiciones precarias de mantenimiento es atacado por múltiples parásitos (punto blanco, Oodinium, ...) y puede sufrir Tuberculosis y erosión de la línea lateral.

La gran especialización alimenticia de este pez hace que muchas veces acabe muriendo por malnutrición, por lo que es más que indispensable ofrecerle una alimentación variada y lo más parecida a la que tiene en la naturaleza. Esta especie se alimenta casi totalmente de pólipos coralinos y, en pequeñas proporciones, de algas y microinvertebrados. En cautividad es necesario ofrecerle alimentos específicos para peces Mariposa o, como mínimo, enriquecer el alimento genérico con compuestos vitamínicos para estas especies. Es de los que más problemas puede presentar a la hora de aceptar el alimento comercial, por lo que para conseguir éxito es necesario introducirlo en un acuario grande, con mucha roca viva y una calidad de agua excelente. otro apunte importante es que este pez debe ser alimentado entre tres y cuatro veces al día ya que de lo contrario irá perdiendo masa corporal lentamente hasta acabar muriendo; Los peces jóvenes necesitan un mínimo de cinco raciones diarias. Si en el acuario existen grandes cantidades de microinvertenrados y algas sólo es necesario suministrar alimento genérico enriquecido, e incluso se pueden introducir algunos esquejes de coral blando de rápido crecimiento (como los del género Zoanthus) para que los vaya royendo. Como ocurre con todos los Quetodóntidos, una alimentación basada enteramente en comida seca genérica durante demasiado tiempo le provoca al animal graves problemas nutricionales que acaban matándolo, por lo que nunca está de más el uso de comida congelada como Artemia o Mysis varias veces a la semana. Para concluir el apartado de alimentación es necesario preguntar en el comercio si se alimenta bien y, llegado el caso, pedir que lo demuestren. Durante los primeros días es necesario alimentarlo con presas vivas o congeladas.

Se trata de una de las especies más tranquilas y sociables entre los peces Mariposa, lo que permite su asociación con multitud de especies. A pesar de que no suele ser agresivo ni excesivamente territorial, en acuarios demasiado pequeños puede mostrarse algo intransigente con peces recién llegados. No hay que asociarlo con otros peces Mariposa salvo que el acuario sea lo bastante grande, tenga muchos escondites y todas las especies entren a la vez y en la fase juvenil, algo que se tambien hay que hacer si se desea mantener más de un individuo de esta especie. A pesar de su rapidez a la hora de coger la comida, puede sentirse cohibido ante peces demasiado grandes y agresivos (como algunas Damiselas) y tampoco debe asociarse con peces demasiado lentos o tímidos que se quedarían sin comer (Mandarines, Gobios, peces Globo, ...). Peces de tamaño medio y actitud nerviosa (Cirujanos como el Hepatus o el Z. Veliferum, peces Ángel del género Centropyge, Lábridos como el Dimidiatus y peces Payaso) son ideales para convivir con esta especie. No es recomendable su asociación con peces Mariposa que tengan una líbrea parecida a la suya para evitar constantes peleas por el territorio. Este pez es incompatible con los invertebrados sésiles (Corales duros y blandos, Anémonas, Cerianthus, ...) ya que son la parte principal de su dieta. No suele causar daños a Caracoles, Cangrejos y Gambas. Es compatible con las distintas macroalgas pero devora ávidamente los rizoides y las frondas jóvenes de las mismas.

Hasta la fecha no se ha conseguido su reproducción en cautividad. En la naturaleza desovan en aguas abiertas de forma comunitaria o en parejas. Los huevos son arrastrados por las corrientes y las larvas pasan varias semanas en suspensión entre el pláncton superficial antes de descender al fondo y empezar la fase adulta.