Entre las especies de peces dulceacuícolas más demandadas para adornar acuarios se encuentra el para muchos injustamente popular Cíclido loro, un pez creado artificialmente mediante cruzamientos interespecíficos aún sin determinar (se cree, sin embargo, que el más probable sea un cruce entre Vieja Synspila y Amphilopus Cintrinellus, aunque algunos escritos involucran también al Heros Severus e incluso al Cichlasoma Nigrofasciatum) ya que nunca se han dado a conocer públicamente. Se trata de un pez híbrido en la mayoria de casos totalmente deformado que presenta, entre otros problemas, atrofia de la vejiga natatoria, deformaciones bucales (siendo característica la triangular), ausencia de opérculos branquiales y cruvatura de la espina dorsal, lo que los convierte en peces muy débiles, malos nadadores y sensibles a muchos problemas acuáticos generalmente inofensivos para otros peces. Sin embargo conservan el clásico modo de vida territorial de cualquier especie de Cíclido así como la prodigación de atentos cuidados a sus crías. No disponen de nombre científico ya que se han originado artificialmente. Actualmente se han asilvestrado en muchas zonas tropicales (principalmente en Suramerica) en las que estan causando grandes estragos en la biodiversidad acuática. Suelen vivir en parejas o en tríos entre la vegetación y las sinuosidades de las zonas poco profundas de las aguas poco movidas.
Lo más característico de estos peces es que cada ejemplar presenta ciertas variaciones físicas, siendo muy difícil encontrar a dos ejemplares totalmente iguales. Ello se debe a que los machos, estériles, no pueden fecundar los huevos de las hembras ni, por lo tanto, traspasar sus genes a sus hijos. El resultado de estas variaciones procede de que los huevos son fecundados por machos de otras especies próximas o compatibles (principalmente A. Citrinellus), lo que unido a la propia variabilidad de la secuenciación embrionaria, es el motivo de tantas diferencias físicas. Presentan el cuerpo más o menos comprimido lateralmente, robusto, con o sin giba tras la cabeza, aletas generalmente cortas y redondeadas (la dorsal suele terminar en punta) y un contorno más o menos circular, con la cabeza de pequeño tamaño. La boca puede ser o no deforme, siendo posible encontrar ejemplares que pueden cerrarla por completo y ejemplares con el labio inferior curvado hacia abajo, lo que imposibilita el sellado de la cavidad bucal. En ocasiones se ven ejemplares desprovistos de opérculos branquiales, y sus ojos, generalmente de gran tamaño, tienen las pupilas desproporcionadas. En tiempos presentes se han popularizado peces loro sin aleta caudal (que se les corta nada más nacer, dándoles una terrible forma acorazonada). El color básico que suelen presentar es el amarillo o el naranja rosado en todo el cuerpo (aletas incluidas), aunque cada vez más se colorea artificialmente a los peces mediante agujas de tatuaje o mediante colorantes externos (siendo el último método "menos perjudicial" segun los practicantes de éste método). De hecho, los niveles de tintado han llegado a tal extremo que se pueden ver peces con grafías chinas, figuras, letras e incluso palabras cortas, en sus flancos (llegando a pintarles también los labios), una práctica que debe denunciarse para evitar la mala calidad de vida de los animales y su muerte prematura, y especialmente, su sufrimiento innecesario. Los colorantes externos se emplean para obtener peces azules, verdes, grisáceos, magentas o turquesas (muchas veces brillantes) que, si bien no se clavan agujas a los peces, el baño en ácido que se les da para instalar el tinte es, igualmente, muy peligroso para ellos. Además, el color artificial añadido se destruye con el tiempo (pocos animales así tratados llegan a vivir tanto tiempo). La aleta dorsal de los machos acaba en punta mientras que la de las hembras es redondeada, miden unos 20 - 30 cm de longitud y no suelen sobrepasar los 10 años de vida siempre que nunca hayan sido tintados artificialmente ni mutilados.
Debido a sus deformidades tanto físicas como fisiológicas requieren cuidados más concretos y delicados que la mayoría de peces comunes en los acuarios. No se muestran muy exigentes con el tamaño del tanque, siendo suficiente unos 100 litros por ejemplar. La decoración les es totalmente indiferente, aunque dada la costumbre que tienen de removerlo todo y cambiar los adornos de sitio conviene que todo esté bien fijado a los cristales con algún adhesivo atóxico. Como muchos Cíclidos, excavan en el sustrato desenraizando las plantas y también devorándolas, por lo que las especies vegetales que se pueden mantener con ellos son pocas (plantas sin enraizar y de hojas duras como las Anubias y el Helecho de Java). No les agradan las corrientes demasiado fuertes debido a la forma de su cuerpo aunque necesitan una eficaz oxigenación. Producen muchos desechos, por lo que se debe filtrar muy bien el agua y cambiarla parcialmente al menos cada siete días para evitar el incremento de compuestos nitrogenados. Se adaptan muy bien a un gran abanico de condiciones acuáticas (pH entre 5 y 9, dureza entre 0 y 40 ºdGH y temperatura entre 25 y 40 ºC) aunque no toleran nada bien variaciones bruscas de los mismos. No conviene que el nivel de nitratos supere las 50 ppm, y es mejor que no hayan nitritos ni amoniaco. Son fácilmente atacados por el punto blanco, el Oodinium, el parásito Hexamita y los Hongos, especialmente cuando la temperatura es demasiado baja o si están expuestos a variaciones bruscas de las condiciones acuáticas.
No son nada exigentes con la comida, aceptando sin problemas cualquier tipo de alimento que se les suministre: Escamas, gránulos, vivos, congelados, liofilizados, verduras, fruta, carne cruda o cocida, insectos, pequeños peces y demás, siendo muy habitual que tomen el alimento de la mano del acuariófilo en pocos días siempre que el acuario sea de su agrado. Necesitan bastantes aportes vegetales en su dieta, siendo necesario cumplir este requisito si no se desea que devoren las plantas acuáticas. Son muy proclives a sufrir la enfermedad de la vejiga natatoria si reciben demasiado alimento seco, siendo más recomendable alimentarlos con bastantes frescos para evitar este problema.
En el plano social, cada individuo es distinto. Mientras algunos ejemplares pasan olímpicamente de todos sus compañeros e incluso llegan a defender a los menos dotados de otros peces más grandes, otros ejemplares se muestran extremadamente agresivos hacia cualquier especie con la que conviven, atacándolos constantemente pero sin llegar a producir heridas debido a la deformidad de su boca. su comportamiento intraespecífico es bastante satisfactorio, pudiendo convivir muy bien en grupos de unos cuatro o cinco peces siempre que todos entren en el tanque al mismo tiempo o en su fase más juvenil para evitar peleas por el espacio. No conviene asociarlos con peces demasiado activos para evitar que se queden sin comer, con peces demasiado pequeños a los que puedan devorar o con peces demasiado tímidos o asustadizos que pueden ser intimidados constantemente. Un buen ejemplo de asociación consiste en juntarlos con Óscares, Flowerhorn, Plecostomos, Cíclidos Convictos, Bocas de fuego, Terrores verdes o Cíclidos Joya Africanos, entre otros.
Su reproducción es una cuestión muy curiosa ya que no es posible conseguirla mediante parejas de Cíclidos Loro debido a que los machos son estériles. Sin embargo, sí pueden conseguirse nuevos alevines de esta especie artificial cruzando hembras de pez loro con algún macho de Cíclido compatible. El proceso reproductivo, al igual que el resto de cíclidos, se inicia con un elaborado baile nupcial y la posterior limpieza de un soporte adecuado para albergar la puesta. Las hembras expulsan unos 300 huevos que deben ser o fertilizados por otra especie de Cíclido (en cuyo caso la hembra los cuida excelentemente hasta la eclosión) o bien traspasados a un acuario en el que esté reproduciéndose otra pareja de Cíclidos como el A. Citrinellus de forma que los huevos de pez loro sean fecundados y cuidados como si fueran suyos. La eclosión ocurre en unos dos días y los pequeños alevines se alimentan de infusorios, Artemia recién eclosionada o aliemento seco finamente pulverizado. Crecen con bastante rapidez y son muy sensibles a la polución y a las variaciones bruscas de las condiciones acuáticas. Es recomendable que los alevines se desarrollen totalmente aislados de cualquier pez (ya sean sus propios padres u otra pareja ajena) para evitarles dificultades.
Muy bueno, tengo uno pequeño, es normal que de noche quede al fondo del acuario y quieto ?
ResponderEliminarEs totalmente normal. De hecho casi cualquier pez que puedas encontrar descansa por la noche en el suelo del acuario :).
EliminarHola. Tengo crías de Perico y Rey Midas pero no sé si apartarlos o dejarlos en la pecera porque sus padres los protegen muy bien. Tampoco sé qué cómo darles de comer porque no les llega la comida o si pueden comer lo que dejan sus padres. Gracias
ResponderEliminarMientras veas que son protegidas por los padres no debes preocuparte, pues estos les irán acercando el alimento. Para estar más seguro usa alimento seco pulverizado. En lo que respecta a separarlas, puedes hacerlo perfectamente, pero ten cuidado porque el Rey Midas es muy agresivo y puede intentarlo todo para que no lo consigas. Una vez que las separes de sus podrás alimentarlas con comida seca pulverizada o con suplementos para alevines. Puedes apartarlas tranquilamente de sus padres; Se hace con muchas especies de Cíclidos y no da problema alguno.
ResponderEliminarBuenos días
ResponderEliminarTengo una pregunta, ¿podrias especificar un poco mas que comida hay que darle?. Tengo uno desde hace cuatro años y siempre le he dado lo mismo, comida granulada.
Muchas gracias
Es cierto tengo uno hace 12 años , ya perdio un ojo pero sigue vivo
ResponderEliminarMe gustaría que publicarais las fuentes si no es molestia
ResponderEliminarMe gustaría que publicarais las fuentes si no es molestia
ResponderEliminarHola.. Mi acuario de 180 l con 10 cíclidos africanos tiene un buen tronco y varais cuevas con rocas, es posible introducir un pez loro?
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